Hay un momento, han dicho muchos, en el que te llegas a hartar de todo. De tu ropa, de tu pelo, de tu piel, de tus ojos, de tu aspecto, de tu estilo, de lo que escuchas, de lo que escribes, de lo que haces y, lo peor/mejor, de lo que no haces. Te das cuenta de que te sientes ultrajado, desnudo, estereotipado. Es entonces cuando unos cuantos se dan cuenta de la realidad: estás ESTANCADO. Si no es que algo peor. Estás en un punto muerto. Uno donde la nada y el todo vienen a vale una reverenda fregadera, y, a final de cuentas, nada se es y todo es posible.
Es entonces cuando abro los ojos y me pregunto... "¿Y eso qué...?"
Me empiezo a sentir un poco melodramática conforme los días pasan. Pero que le hacemos. Una Saraa sin drama ni alegría es algo sin armonía total. Dejémonos de cosas. A lo que el mundo nos trajo. Si me siento bien, te lo digo, y si no, pss lo escribo y ya. Si te enteras, muy bien. Si no, allá tú, eres el que ya no sabrá.
Me empiezo a sentir un poco melodramática conforme los días pasan. Pero que le hacemos. Una Saraa sin drama ni alegría es algo sin armonía total. Dejémonos de cosas. A lo que el mundo nos trajo. Si me siento bien, te lo digo, y si no, pss lo escribo y ya. Si te enteras, muy bien. Si no, allá tú, eres el que ya no sabrá.
Renovemos los votos. Hola, nuevo año 2010. Muy tarde, sí, pero mejor que nunca. Hagamos recuentos, cantemos juntos, llora conmigo. Dímelo, y te digo.
Nomás pa' que sepas. Saraa renovada. La misma cosa friki. Nuevas perspectivas. Y... que comience esto.
Nomás pa' que sepas. Saraa renovada. La misma cosa friki. Nuevas perspectivas. Y... que comience esto.
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